Llenar la piscina
En pleno verano y con los sudores que nos llevan debajo de la ducha, cada rato que podemos, y sales y otra vez sudando que parece que no ha pasado. Y te vuelves a la ducha y dices… En serio, pero ni pidiéndolo en Lourdes… Pues claro, la santa está para otras cosas y para tu verano lo que mejor tenemos es que llenes la piscina y aproveches los consejos de JBetriu para su mantenimiento. Así, incluso después del verano el agua se mantendrá limpia y desinfectada para un uso adecuado.
La piscina en invierno
Para no malgastar el agua de la piscina, podemos aprovecharla de año en año si seguimos el tratamiento adecuado para mantener el agua limpia. Para ello, se recomienda aplicar una cloración de choque y hacer funcionar la depuradora varias veces por semana, evitando así también que se engarrote.
En cuanto al pH del agua (valor de acidez), la cantidad recomendada debe ser entre el 7,2 y el 7,6 para evitar que el agua se vuelva turbia y aparezcan algas.
Usar cobertores o lonas nos ayudará a mantener la piscina en buenas condiciones durante la época fría, ya que evitará que el agua se ensucie, así como reducirá las posibilidades de congelación y las posibles caídas o accidentes.
Si no se cuenta con un cobertor para piscinas, deberemos recoger regularmente las hojas y demás residuos con el recoge hojas y evitar así que se ensucie el agua y, a la vez, que se cuelen hacia los mecanismos de la bomba.
Asimismo, para mantener la piscina en invierno sin cubrirla, también se recomienda dejar un flotador dentro de la piscina para tratar de evitar la congelación del agua, especialmente en zonas de climas más fríos.
Mantenimiento de la piscina tras llover
Si has optado valientemente por dejar tu piscina al descubierto, es importante limpiar el agua de inmediato cuando hayan cesado los días de lluvia. Pon a funcionar la depuradora el tiempo que sea necesario. Presta especial atención al filtro -límpialo si fuera necesario- y utiliza un limpia fondos para asegurarte de dejar la menor suciedad y evitar así el crecimiento de líquenes y demás organismos.
Has de ser consciente también que, de manera general, las temperaturas tenderán a subir, lo que facilitará que las algas se multipliquen y el agua se volverá verde. Además, el pH y el cloro del agua se verán alterados, por lo que bacterias y hongos atacarán la piscina. Recuerda ajustar los valores a niveles normales para impedir que esto suceda.